Las soledades de Olga - Ignacio Martinez.

Título: Las soledades de Olga.

Título original: Las soledades de Olga.

Autor: Ignacio Martínez. 

Año: 2020.

Saga: no.

Género: Novela literaria.

Cantidad de páginas: 192.

Editorial: Planeta.

Sinopsis:

La peripecia de una madre y una hija de desaparecidos en la búsqueda de la

verdad.

Este libro recupera la peripecia de una madre y una hija de desaparecidos, la búsqueda de la verdad. Es un testimonio íntimo ofrecido en diálogo con el autor y a través de las páginas de un diario íntimo, allí emerge el tesón de un ser humano por recuperar a una nieta y encontrar el destino final de una hija.

La búsqueda incuestionable, necesaria, poseedora de todos los argumentos del mundo, eso nadie lo puso en duda jamás, pero tuvo que cargar con el peso de preguntas de este tenor: «¿Qué es mejor, sentirlos desaparecidos o saberlos muertos?»

A los que permanecieron de este lado, como Olga, solo les quedó seguir los nuevos caminos que se abrían para reconstruir lo sucedido con los desaparecidos, pedacito a pedacito, palabra por palabra, para devolverles la existencia en algún lugar donde prevaleciera la Justicia, o en algunas

páginas donde nuevas miradas los hallaran, o al menos como recuerdo.

Yo siempre creí firmemente que cuando viniera la democracia iba a tener la verdad, que mis hijos iban a ser reclamados por ese gobierno democrático y que iban a volver.

Si siguen desaparecidos, dice Soledad, en algún lugarcito remoto del alma una abriga la esperanza de encontrarlos.

Mi opinión:

La reseña de hoy salió un poco más tarde de lo que tenía planeado ya que mi día se complicó un poco a causa de un par de tareas que no podía posponer, e incluso, como podrán ver, esta reseña tampoco tiene nada que ver con el contenido planeado para octubre que era poner algunos thrillers o libros de horror. Pero ayer, pasé a buscar unas colaboraciones de Planeta de libros Uruguay, así que ya aprovecho para agradecerles el ejemplar, y este fue uno de los libros que vino en ese paquete, estaba deseando reencontrarme con este autor que disfruté durante toda mi infancia, no solo por su trabajo para niños, sino también por unos cuentos que mi hermano me obsequió y resultaron ser para adultos.

Recuerdo con mucho cariño como "Cuentos para leer en el ómnibus" me acompañó durante mi infancia y comienzo de la adolescencia ya que era el único libro que tenía en casa y al cual podía acceder cuando por otros motivos no podía concurrir a la biblioteca a buscar nuevas lecturas. En fin, cuando vi entre las novedades que Ignacio había escrito hablando sobre los desaparecidos y basado en una de las tantas familias, conformadas por: madres, padres, hermanos, hijos, sobrinos, nietos, etc. que a día de hoy siguen buscando respuestas, pero sobre todas las cosas: justicia por sus familiares desaparecidos durante el periodo de dictadura en América Latina.

Ignacio se encargará de relatarnos la vida de Olga, una madre que perdió a su hija, Ileana Sara María García Ramos, y al esposo de esta última, Edmundo "El flaco" Sabino Dossetti Techeira, durante el periodo de dictadura. Olga junto con su marido fueron de las pocas familias con suerte que lograron encontrar a su nieta, Soledad, antes de que fuera secuestrada o quién sabe que sucedería con ella si se la hubieran llevado con sus padres ya que se trataba de un bebé con apenas unos meses de nacida (en ese periodo muchos niños fueron secuestrados y utilizados para ganar aliados/amigos al entregarlos a familias "importantes").

Durante estas páginas conoceremos tanto a Olga como a su pequeña nieta Soledad, quién a día de hoy es una mujer adulta con sus propios hijos, también sabremos el dolor que uno debe afrontar ante la pérdida de una hija, la incertidumbre que nos acecha sobre lo que le pudo haber pasado, si estará con vida o no, ¿Dónde estarán sus restos?, ¿Qué habría pasado si...?. Y varias incertidumbres de este tipo que incluso, pueden prexistir en esta familia a día de hoy.

El autor no solo se encargará de contarnos todas las travesías de Olga cuando supo que su hija fue capturada junto con el marido y un amigo del matrimonio. Sabremos que ella nunca dejó de luchar, no solo para traer a Soledad desde Argentina a Uruguay, sino que también, para obtener respuestas del paradero de Ileana, Edmundo y el amigo de estos tres, Alfredo Bosco. Por ello, Olga contará todas las veces que viajó a Argentina para obtener respuestas e investigar por cuenta propia el paradero de todos ellos.

Olga cuenta todo lo que pensaba con respecto a lo que estaba viviendo, pero a pesar de estar desdichada por la desaparición de su familia, aunque debe continuar con su vida, por Soledad, por su esposo, para comenzar la interminable búsqueda del pedazo que le han arrebatado. Es así que podremos leer algunas de las cartas que escribía para Ileana, no solo como método de catarsis, sino, para que cuando su hija volviera pudiera leer todo lo que significó su ausencia para la familia, de esta manera tampoco sentiría que se perdió los avances de la pequeña Soledad mientras vivía con sus abuelos maternos.

Sin dudas, esta historia se devora, una vez que se comienza a leer uno no quiere parar porque los testimonios de Olga son atrapantes y maravillosamente desgarradores. Uno, que ya conoce la verdad a día de hoy y posee una vaga idea de lo que sucedieron en aquellos lugares dónde tenían encerradas a las personas, sabe que Ileana no volverá a ver a su esposo, ni sus padres, mucho menos para ver como Soledad se transforma en la mujer que es hoy, no logrará conocer a sus nietos ni verá el mundo nunca más, por desgracia Ileana y su esposo aún está allí fuera, esperando justicia, viviendo en el recuerdo de su familia, incluso en los pensamientos de quienes recordamos las injusticias cometidas durante las dictaduras.

Este libro es super respetuoso, encantador y desgarrador a la vez, porque al conocer el testimonio de Olga uno se siente más cercano a los desaparecidos, permite incluso verse en el lugar de Olga o porque no, de la misma Soledad, una pequeña a quien privaron de crecer en compañía de su madre y su padre, la cual quedó lesionada por aquel forcejeo desesperado de su madre con los captores para protegerla a como de lugar.

Un pequeño libro, pero poderoso, que me dejó sin palabras, me hizo lagrimear por momentos, sobre todo cuando leía las cartas que Olga escribía con tanta dedicación, cada vez que tenía tiempo, para Ileana y el Flaco, aunque siempre dirigidas a su hija, evidentemente.

Un libro que me fascinó muchísimo y el detalle de la portada, al poner todos los recuerdos que Olga guardó para el regreso de su familia me desgarró el alma.

Un libro que todos deberíamos leer para tener la memoria bastante fresca con respecto a sucesos que no queremos vivir nunca más.

¿Han leído libros de este tipo? 

Por mi parte, es el segundo que leo, el primero fue uno de ficción dónde unos niños daban su punto de vista sobre la dictadura, pero no se compara con este de Ignacio.

Eso es todo por hoy.

Solo me queda decirles que nos leemos en comentarios.