Devoradores de sombras - Richard Lloyd Parry.

Título: Devoradores de sombras.

Título original: People Who Eat Darkness: The Fate of Lucie Blackman.

Autor:  Richard Lloyd Parry.

Año: 2010.

Saga: no.

Género: true crime.

Cantidad de páginas:  496. 

Editorial: RBA (Distribuye editorial Océano en Uruguay)

Sinopsis:

En el año 2000, poco después de llegar a Tokio para trabajar en un club nocturno, la británica Lucie Blackman, exazafata de vuelo de veintiún años, desapareció. El caso despertó mucho revuelo mediático y activó una búsqueda desesperada en la que incluso participaron zahoríes australianos.

Se especuló con la entrada de Lucie en una secta y con su secuestro por una banda de traficantes de órganos hasta que salió a la luz su relación con un misterioso cliente.

Fruto de diez años de investigación,  Devoradores de sombras se lee como un thriller que desafía a nuestra credibilidad, pero es también un retrato del lado más sórdido de Japón, un drama judicial y la triste historia de una familia enfrentada y de una pobre chica que se encontró con el mal en estado puro.

P.D: ignoren el error ortográfico que tuve en el nombre de Lucie.

Mi opinión:

The Roppongi distrito en Japón.

Es el segundo libro de no ficción que leo y ya conocía el caso a causa del capítulo que le hicieron en un programa de tv británico qué recrea todo lo que sufrió Lucie Blackman en el año 2000, durante su estancia en Tokio.

Lucie solía desempeñar tareas como azafata, pero cansada de la rutina y abrumada por la cantidad de deudas que acumulaba decidió ir a hacer "dinero fácil" como la hermana de una de sus mejores amigas, esta residió en Japón, trabajo acompañando caballeros y cuando se cansó volvió a su ciudad con bastante dinero y sin deudas.

Lucie se fue a Tokio a sus 21 años junto con una amiga que era como su hermana, estando allí, a causa de la falta de documentos como ciudadana japonesa, ambas jóvenes desempeñaban labores en un club nocturno de Tokio, básicamente se encargaban de ofrecer entretenimiento (basado en charlas, juegos de karaoke, prestar un oído, etc) sin necesidad de mantener relaciones sexuales. A veces, incluso debían de verse con sus clientes para salir a cenar o fingir ser su compañera para que dicho cliente no se sintiera solo.

El problema comenzó cuando Lucie acudió a una cita con uno de sus clientes y jamás volvió a aparecer para irse de fiesta con su amiga.

Periódico donde se acusa a la policía
de perezosa.

El caso tuvo un gran revuelo a nivel mediático e incluso un montón de personas brindaron el apoyo a la familia Blackman para poder descubrir cual era el paradero de Lucie. Aunque todo esto también atraerá estafadores de todo tipo. En el caso de Lucie habían varias teorías, la primera, que estaba en una secta, que la secuestraron para tráfico de órganos. Pero todo esto quedó descartado hasta que indagando entre las pertenencias de Lucie encontraron que tenía una extraña relación con uno de sus clientes en el club nocturno.

Este hombre en cuestión se mostraba enamorado de Lucie en los mails y cuando esta se puso de novia con un chico, comenzó a dejar de lado a su cliente, este no lo tomó muy bien, por lo cual comenzó a mandar un montón de mails (en los cuales se notaba el despecho) a la chica.

Joji Obara.

Más adelante, se descubriría que el asesino de la chica, era Joji Obara, el era un consumidor de drogas y en la investigación realizada en este libro, uno puede notar la fijación con las mujeres occidentales que este poseía.

Obara, con el tiempo, desarrolló un patrón de comportamiento criminal.

Se citaba con mujeres occidentales y les administraba medicamentos que conseguía de manera ilegal  para apresar a sus víctimas, con los fármacos lograba dejarlas inconscientes, y tras el secuestro las violaba ya que estas no podían defenderse ni objetar contra él.

También se descubriría que Obara tenía como víctima a mujeres japonesas y occidentales. Pero lo que llevó a la policía a dar con él, no fueron los mails que le envió a Lucie, sino que este grabó todos sus ataques en una cinta de vídeo, la policía comentaba que al menos 4.000 cintas fueron recuperadas por ellos.

La policía encontró extensas revistas en las que Obara hacía referencia a eufemismos que describen sus agresiones sexuales.

El 09 de febrero del 2001 el cuerpo de Lucie fue encontrado, estaba enterrado, desmembrado y su cabeza estaba rapada y metida dentro de un bloque de cemento. El cuerpo estaba enterrado con poca profundidad y cerca del departamento de Obara.

Muchas gracias Editorial Océano del Uruguay por el ejemplar.

En este libro, Richard utiliza todo lo averiguado en 10 años de investigación, aunque logró que Devoradores de sombras fuese hecho como una novela sencilla de thriller.

Si bien todo esto ya lo adelanta la sinopsis no lo creía, pero lo comprobé. Si bien demoré tanto en leerlo por problemas personales disfruté y sufrí junto a la familia de la pobre Lucie.

Un crimen que a día de hoy sucede en cualquier parte del mundo y hasta se mantiene al victimario en el anonimato para protegerlo, un libro que todos deberíamos leer ya que el mundo está plagado de Lucies que quieren volver a su hogar, plagado de familias Blackman que quieren respuestas de dónde están sus hijas, que sucedió con ellas, etc.

Un libro sumamente desgarrador, que me hizo llorar, tener rabia e impotencia. 

Esta historia demostró como los extranjeros valen tan poco para los japoneses, ya que la familia de Lucie no fue escuchada hasta que volvieron al caso mediático, jugaron con la televisión en lo que parecería una búsqueda interminable, la familia Blackman siempre jugaba el papel de los pobres padres y la pobre hermana que buscaban a Lucie (lo cual es real, pero en la tele debían exagerarlo, los medios son morbosos y quieren un show, los Blackman sabían como proporcionarlo).

También tuvieron que pedir ayuda a un ministro o embajador británico que estaría de pasada en Japón para que este hablara del caso de Lucie y lo volviera conocido, de esta manera, no podrían negarse a ayudarles.

Es fascinante todo lo que cuenta sobre la cultura japonesa también, sin dudas Richard realizó una investigación cuidadosa y supo contarla desde el respeto.

¿Conocían el caso de Lucie?

¿Son de leer True crime? ¿me recomiendan alguno?

Acá les dejo el caso en Youtube para que lo puedan ver.

P.D: no es coincidencia que este post lo este realizando en marzo, es un adelanto de lo que se vendrá por este #Mujeres2020 de la mano de Laura, del blog Palabritas ajenas y del Instagram.